
domingo, 10 de diciembre de 2017
Los derechos desde testimonios humanos

martes, 31 de octubre de 2017
Puentes construidos desde la femineidad
Iraida Hernández Valdés es de esas mujeres demasiado
serias, a quien es difícil sacarle una sonrisa, de manera que puede imaginar el
lector cuán difícil resultó invitarla a conversar sobre su vida. Media entre
nosotras una grabadora y los flashes de la cámara la hacen sentir al
descubierto. Está llorosa, sus compañeros de trabajo acaban de reconocerla como
una trabajadora excepcional. Será porque su vida laboral, más de 35 años a pie
de obra, con un casco de protección y rodeada de hombres, le han endurecido y
su oficio de indicar y mandar a ejecutar en una construcción, la han
encasillado en esa imagen de mujer de carácter, como decimos en buen cubano
rellollo.
miércoles, 11 de octubre de 2017
Mujer de café
Allá por el Mayarí de Cienfuegos, en medio del macizo montañoso de Guamuhaya comprendido en el término municipal de Cumanayagua, donde café y árboles conforman el imperio de la Naturaleza, vive Madelaine Silvera Labrada, reina de la finca Los Sarmientos, nombre que se le atribuye al lugar por el apellido de los anteriores propietarios.
En medio de aquel vergel, ahora lacerado por los vientos del huracán Irma pero en franco proceso de recuperación, ella y su esposo Cándido le sacan provecho a más de 4 hectáreas plantadas de café de excelente calidad.
sábado, 19 de agosto de 2017
La mujer bajo el sombrero
Cuando durante una visita por el Jardín Botánico de
Cienfuegos (JBC), alguien me la presentó, y escuchó la palabra periodista, noté
cierta reticencia a conversar. Pero no hubo barreras, pese a un incidente
amargo que recuerda con un reportero, saqué mi mejor herramienta en el oficio,
esa de lanzar una andanada de preguntas, de la que resulta muy difícil que
alguien se resista. Hilda Rangel Andrade es de esas mujeres luchadoras, que
tiene un montón de proyectos pensados y concretados. Hace 22 años trabaja en el
JBC, cuando recién graduada como Bibliotecaria solo encontró plaza de
secretaria del director de la institución.
domingo, 9 de julio de 2017
María y la gracia de sanar
María Elena Hernández Quintana es enfermera hace más de
45 años y reconoce sin remilgos que tiene 67 de edad, porque los ha vivido con
intensidad y se considera una mujer plena. Se graduó allá por el 1972, en
Trinidad, la entonces capital del Regional Escambray, provincia de Las Villas. Usa
el traje blanco del oficio y la cofia con lista azul, en señal de que es la
jefa de Enfermería del Policlínico de San Blas, en la serranía cienfueguera,
otrora hospital, rodeado de empinadas montañas y justo donde comienza la Loma
de la Ventana, peligrosa y empinada subida hasta el corazón mismo del macizo de
Guamuhaya.
La abuela de todos
Tiene 84 años, es nativa del carismático pueblo de
Congojas, en Cienfuegos, y desde hace dos años, aproximadamente, vive en Rodas,
la cabecera municipal, en el Hogar de Ancianos que da cobertura a dos
territorios, además, Aguada y Abreus. Tiene perfecta movilidad, amplia sonrisa,
y unos bellísimos ojos azules.
Le pregunto con cierta reticencia, porque es una
interrogante difícil en estos casos: ¿Tiene hijos? “No tuve”, ¿y su esposo,
vive con usted acá? ¿Falleció? “No, nunca me casé ni tuve hijos, ¿no has
escuchado que en todas las familias del campo siempre había una solterona? Ah,
bueno, pues en la mía fui yo.
martes, 13 de junio de 2017
Operación Barbarroja en Cuba
“Si una aguja cae en el Escambray, una
aguja encontramos”.
Fidel Castro Ruz. 8 de septiembre de 1960
La primera captura de un “alzado” en el Escambray, tuvo
lugar en La Sierrita, poblado en las estribaciones de las montañas
cienfuegueras, durante una operación dirigida por el propio Fidel Castro Ruz en
septiembre de 1960
Se agota casi la jornada del 7 de septiembre de 1960 en
La Sierrita, poblado de la premontaña del municipio cienfueguero de Cumanayagua,
para entonces perteneciente al Regional Escambray, en la antigua provincia de
Las Villas. Son casi las 11 de la noche y a esa hora ya la mayoría duerme, como
suele ser hábito entre los campesinos. Sólo permanecen despiertos aquellos que,
de manera voluntaria o en ejercicio de su afiliación al Ejército Rebelde,
tienen el encargo supremo de custodiar los sitios de interés económico y velar
la tranquilidad del sueño de la gente.
El hombre destacado en la gasolinera siente el paso
apresurado de alguien que se acerca y extrema la alerta. Da el alto a un
individuo que, salido de la oscuridad, viene con un fusil M-1 y jadeante, como
quien ha cubierto un buen trecho a paso rápido. El recién llegado le dice ser
portador de información valiosa relacionada con desafectos a la Revolución.
viernes, 21 de abril de 2017
Amado, el hacedor del fuego
![]() |
Amado Moreira
Urra se autocalifica hijo del fango y los mosquitos, del mundo del soplillo,
los hornos y la ciénaga. /Foto: Ismael Francisco
|
Llegar hasta la Piojota, capital del carbón en la Ciénaga de Zapata,
supone adentrarse por un camino seco y polvoriento. El terraplén nace en
Pálpite y con sólo preguntar por los hornos, “ahí mismitico, el humo avisa”, se
escucha por respuesta, porque este es un oficio bien reconocido en la zona.
Ahí está Amado
Moreira Urra, parado en medio del descampado, justo se disponen a desarmar dos
hornos holandeses, resultante de un novedoso proyecto implementado, más
económico que el tradicional. “Son rápidos y fáciles de montar, pero ¡qué va!,
la calidad no es la misma”, comenta este carbonero, hombre curtido por el sol y
el salitre, quien le conoce mucho al arte de hacer carbón.
“Soy hijo del
fango y los mosquitos”, dice tras una carcajada, ese mundo de soplillo, hornos
y ciénaga, son el universo en el cual encuentra el modo de ser y existir.
domingo, 9 de abril de 2017
Santiaga, embajadora del tabaco cubano
![]() |

El ruido de las chavetas sobre las mesas de trabajo
y el aroma inconfundible del tabaco nos anuncian que estamos en la sala de
torcido, ese lugar casi mágico de donde salen los puros que identifican a Cuba,
la tierra del mejor tabaco. Prevalecen las mujeres y de la raza negra, entre
los obreros; es como si ellas le pusieran un toque especial al producto final.
Pero entre todas encuentro a Merisis Santiaga González Armenteros, mi candidata
a entrevistada, quien acumula una larga y rica experiencia en el oficio de
tabaquera.
Hace poco, relativamente, regresó de
Europa, donde participó en la promoción del producto cubano. “Sí, estuve en
Bélgica durante unos 60 días, fue una experiencia inolvidable, y también en
Holanda, porque como son países fronterizos se hacía fácil acceder. Resultó un
público increíble, conocedor de la historia del tabaco y lo que significa para
esta Isla, admiradores de Cuba. Trabajamos en las Casas de Habano, donde se
hacen cataciones de ron y degustaciones, incluso del maní; y como parte de ese
espectáculo, entraba yo a torcer a pedido los puros, resultaban jornadas
increíbles, muy cubanas allá en la fría Europa”.
lunes, 13 de marzo de 2017
Laura y las cebollas

Tiene 21 años, y quizá cambió el estudio por el trabajo de manera prematura, digo yo, porque se supo más útil entre los suyos allá en Balboa, la comunidad perteneciente al municipio de Lajas, en Cienfuegos, donde otrora el olor del mela’o de la caña y el pitazo de la fábrica de azúcar eran señal de vida. O vaya usted a saber qué pasó por la cabeza de Laura Limonte Suárez para no continuar en la escuela. Ella no responde cuando inquiero por una profesión, solo se encoge de hombros, y nada, tengo esa manía de pensar en la Universidad para todos, sin a veces caer en cuenta que la sociedad también necesita de otros oficios.
La muchacha teje una ristra de cebollas moradas, y cuando son cerca de las 10:00 a.m., ya tiene una buena cantidad. ¿Cuánto te pagan en este lugar? “Dos pesos por ristra. Esta es la cosecha de Rey, y él contrata personal para hacer el trabajo”, y en derredor veo a muchachos como ella, teje que teje, y escuchando música con sus celulares. Y resulta hasta curioso, porque han desarrollado una técnica de sujeción con el dedo pulgar del pie.
viernes, 3 de marzo de 2017
Fefa quiere salir a crear
Me la encontré en un evento de mujeres campesinas, toda
engalanada y elegante, vaya, que nadie podía caer en cuenta que se trata de una
guajira rellolla, a quien le gusta mucho su vida, esa que lleva allá en la
finca La Margarita. Mabely Josefa Jassa Cabrera, a quien le acorté ese nombre
tan largo y la bauticé como Fefa, resulta una mujer increíble, que pasa todo el
santo día trabajando y parece no cansarse, si la quieren conocer vengan conmigo,
los invito a leer.
“Yo siempre he vivido en y del campo, La Margarita es la
finca familiar. Claro que estudié, yo soy veterinaria de profesión y amo
los animales, no sabes cuánto siento no
poder montar a mi yegüita Muñeca por estos días, es que tengo una operación muy
grande, de una hernia y debo cuidarme durante un tiempo, sin hacer esfuerzo
físico, pero continúo haciendo una vida normal. Atiendo mi cría de carneros,
las labores del campo, de la casa, y todo lo que hago habitualmente, porque me gusta
estar activa”.
Sabe coser, tejer a crochet, con una sola aguja, y la
enseñó su padre, un campesino que aprendió de su madre un oficio que es casi de
patente femenina; hacer platos típicos de la cocina criolla, y todo ello
aparejado a sus labores en el campo. Tiene tres hijos e igual número de nietos.
miércoles, 22 de febrero de 2017
Oficio que es cubanía
“La mesa de lectura de cada tabaquería
fue tribuna avanzada de la libertad (…)”.
José Martí
Se escucha
por el audio de la Fábrica de Tabacos de Cienfuegos, el cuento Taita, diga
Usted cómo, de Onelio Jorge Cardoso, en la
voz de Marjoris Pupo Vázquez, la lectora, quien encuentra en el salón de
torcido un público receptivo y ávido de cultura.
“El
padre y él —él dos palmos más bajo de la cintura del padre— llegaron hasta la
cerca. El viejo se metió por el portillo de la piña y estaca en mano se fue
sobre el potro.
“¡Condenáo,
arriba de la potranquita del vecino!”.
sábado, 11 de febrero de 2017
Ensayo de la lucidez
No
versa sobre Saramago, el Premio Nobel que tanto admiré y cuyas obras colecciono
con mucho celo, solo acudo a uno de mis autores favoritos, porque ese título
suyo me acompañó todo el día. Aprovechando una visita periodística converso con
Tomás, todo un personaje allí en los predios del Hospital Psiquiátrico de
Cienfuegos. Es el artista plástico de aquella comunidad de casi cien pacientes
y más de 200 trabajadores. Entre los recluidos, cuenta con un privilegio que le
distingue, ha regresado a la lucidez, una breve, espacial y temporal, y nadie
sabe a ciencia cierta cuánto durará. Accede a conversar, y nos acomodamos en un
sofá.
“Yo soy
Tomás Rogelio Artiles Veliz, estoy aquí desde el 2003, pero mi familia viene a
verme y me traen empanaditas y pizzas. Nací en el 1963 y soy pintor, yo he
pintado a todos esos patriotas. Y también estos de acá, que son sobre ciencia”,
dice señalando las paredes del local de rehabilitación, donde recibe terapia
ocupacional. “Estudié en San Alejandro. Conozco a Rafael Cáceres, el pintor, él
me regala materiales”, me dice y busca en una especie de agenda su teléfono,
como prueba de lo cierta de la afirmación, muy cierta.
jueves, 5 de enero de 2017
Alfredo Ceballos Mesa: Amores raigales entre la Medicina y su ciudad
![]() |
El profesor Ceballos Mesa, al centro, durante una conferencia. |
Profesor Emérito del CIMEQ y cienfueguero rellollo. |
Cuando
hace unos días me crucé con el Dr. Ceballos por los pasillos del Centro de
Investigaciones Médico-Quirúrgicas (CIMEQ) en la capital, recordé el placer de haberlo
entrevistado hace unos años, de visita por Cienfuegos, les desempolvo esta
entrevista y les presento a un cienfueguero ilustre, todavía en activo y médico emérito de esa prestigiosa institución.
El Dr.
Alfredo Ceballos Mesa se define como un cienfueguero rellollo, nacido y criado
en la calle de Cristina entre Santa Clara y Dorticós, el lugar más recurrente
para él en esta ciudad. Y a pesar de residir en la capital desde que allá por
los años 50 se fuera a estudiar Medicina, sigue apegado a su Cienfuegos
querido, al que encontró en este último viaje más marinero, en coincidencia con
José Ramón Muñiz en su Luna… encendiendo luceros en el litoral.
Especialista
en Ortopedia y con una larga lista de títulos, incluido el de miembro titular
de la Academia de Ciencias de Cuba, que mucho dicen de cuanto le ha dedicado a
esta carrera, se desempeña en el Centro de Investigaciones
Médico-Quirúrgicas
CIMEQ.
Profesor
de muchas generaciones y un cirujano de prestigio profesional, accede gustoso a
dialogar sobre el presente y las perspectivas de la Ortopedia, visto desde su
óptica y experiencia personal.
martes, 3 de enero de 2017
¿Cuántas soledades comenzadas terminan en 2016?
![]() | |
Como si ya no bastara con la anarquía y el narcotráfico México se estremece con explosión en mercado de pirotecnia. |
En ese
afán de pasar balance del pasado, y al mismo tiempo, hacer planes para el
futuro, me siento frente a la computadora a tratar de resumir el año 2016,
cuando solo faltan horas para que termine. Y me uno al corrillo de quienes
piensan que este, bisiesto para colmo, ha sido nefasto. Pero es que los cubanos
tenemos una particular razón para así considerarlo. Ya en las postrimerías de
noviembre, consternados a pesar de la posibilidad real, recibíamos la madrugada
del 26 de noviembre con la noticia de la muerte de Fidel Castro. Ya con ello
basta y bastará para que el 2016 vuelva su página de calendario como uno
inolvidable, por todo cuanto implica la muerte de un líder, controvertido, pero
admirado por demasiados en el planeta. Ya los cubanos observamos al mundo en
reversa, a partir de un acontecimiento que removió los cimientos de la sociedad
toda.
![]() |
Homenaje a Fidel Castro en Viet Nam. |
Las
elecciones de EE.UU. engrosan la lista, cuando Donald Trump, la beligerancia
hecha presidente, resultó electo y desde el mismo comienzo sus palabras hirientes
y su mirada de enojo nos enjuicia a los cubanos, señal de un mal inicio. Detrás
queda la gestión de Obama, quién ya resulta calificado como la peor
administración desde la Segunda Guerra Mundial, por la “deteriorada imagen de
EE.UU.”, cuando algunos tienen como referente, únicamente, la guerra fría y la
prepotencia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)